
Desde 1985, los profesionales de la salud de todo el mundo consideran que la tasa ideal de cesárea debe oscilar entre el 10% y el 15%. Sin embargo, desde entonces, las cesáreas son cada vez más frecuentes tanto en países desarrollados como en países en desarrollo. La cesárea, cuando está justificada desde el punto de vista médico, es eficaz para prevenir la morbimortalidad materna y perinatal. Sin embargo, no están demostrados los beneficios del parto por cesárea para las mujeres o los neonatos en quienes este procedimiento resulta innecesario.Estudios revisados por la OMS revelan que el número de muertes maternas y neonatales disminuye cuando dicha tasa se acerca al 10%, pero no hay pruebas de que las tasas de mortalidad mejoren cuando se supera esa cifra del 10%. Como en cualquier otra cirugía, la cesárea está asociada a riesgos a corto y a largo plazo que pueden perdurar por muchos años después de la intervención y afectar a la salud de la mujer, y del neonato, así como a cualquier embarazo futuro. Estos riesgos son mayores en las mujeres con escaso acceso a una atención obstétrica integral.
Descargar documento de la Organización Mundial de la Salud: Declaración de la OMS sobre tasas de cesárea. Número de referencia OMS: WHO/RHR/15.02
El mapa de los países donde se practican más y menos cesáreas en el mundo
BBC Mundo, 13-7-2015
En los últimos años, los gobiernos y los profesionales de la salud han expresado su preocupación respecto del incremento en la cantidad de partos por cesárea y las posibles consecuencias negativas para la salud maternoinfantil. Asimismo, cada vez más, la comunidad internacional hace referencia a la necesidad de revisar la tasa recomendada en 1985. Los partos por cesárea se han convertido en una práctica demasiado habitual, a ojos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El consenso científico dice que cada país debería tener una tasa de entre un 10% y 15% de operaciones de este tipo, pero hay lugares en los que sobrepasa el 50%. Para comprobar cómo se rebasan los límites recomendados, basta hacer un repaso a los países en los que más y menos se práctica esta técnica quirúrgica que, según el organismo internacional, debe limitarse a casos en los que el bebé o la madre estén en peligro si se acomete un parto natural, según el criterio del mencionado organismo internacional.
Brasil está en la cima de países con más cesáreas, con un 56% de partos llevados a cabo de este modo, según los datos proporcionados por la OMS a la BBC. La práctica ha alcanzado tal cota que el Gobierno de Dilma Rousseff ha decidido estrechar los controles sobre este tipo de operaciones para hacer descender su número.
Países donde más se practica
No sólo en Brasil se ha extendido esta práctica de una forma desmesurada, como se puede comprobar en el mapa incluido en esta información. Egipto sigue de cerca al país latinoamericano con un 51,8% de los partos llevados a cabo de esta manera. También, Turquía, que es el país que los sigue con una tasa del 47,5%. En África se hallan los países con menos cesáreas, pero el motivo es la falta de atención médica adecuada. Europa tampoco se libra de tener presencia en este vértice de la pirámide, pues en Italia el 38,1% de sus nacimientos se producen de esta manera.
Como se puede ver América Latina esta cirugía está muy asentada: México, Argentina, Puerto Rico, Cuba y República Dominicana se encuentran en ese escalón de países con más cesáreas. Y bajando un peldaño, entre el 25,1% y el 35% de los partos, aparecen Chile, Paraguay, Uruguay, Colombia, Ecuador y Venezuela. Estos últimos tienen niveles similares a países como EEUU, España, China o Reino Unido, entre otros.
Países con menos cesáreas
América Latina tiene países que cumplen con las recomendaciones de la OMS en esta materia, tales como Guatemala y Honduras, y otros que se acercan como Perú y Bolivia. Aunque, en realidad, los países que tienen más bajas cuotas de partos quirúrgicos son, sobre todo, aquellos donde no suele haber una atención médica adecuada, según los expertos que proporcionan estos datos. En este sentido citan a países africanos como Níger, Chad, Etiopía o Burkina Faso, donde las cesáreas apenas corresponden a un 2% de los nacimientos.
Motivos extravagantes
Los motivos para practicar cesáreas numerosas veces se alejan de los apropiados para esta técnica, según explicaron los expertos de la OMS a Valeria Perasso, periodista de la BBC.
En Brasil, por ejemplo, se llegó a entender como “un dos por uno” que permitía a la madre dar a luz y realizar la ligadura de trompas para no tener más hijos en un mismo acto.
También para que los médicos no tuviesen que esperar horas al nacimiento y poder planificar sus horarios.
En América Latina influye mucho en la decisión aspectos de atractivo físico, “preservar una vagina de luna de miel”, en palabras de Marleen Temmerman, responsable del departamento de salud reproductiva de la OMS.
Del mismo modo, en otros países importa la superstición. Como en China, que a veces se realiza la operación para que el niño nazca en una fecha determinada que puede suponer un buen augurio para el bebé.
La situación en España
El colectivo El Parto es Nuestro considera imprescindible una profunda reflexión sobre las tasas de cesáreas en España (una media de 25,25% de nacimientos por esta vía, afectando a una de cada cuatro mujeres), que se sitúan bastante lejos del ideal de la OMS. Tomando en cuenta esta variable y la acusada diferencia de porcentajes entre los hospitales públicos y privados (21,9% y 35,1%, respectivamente), no es difícil inferir que en España se están realizando cesáreas “a la carta” o sin un verdadero motivo médico, atendiendo a otras razones o intereses que no son, estrictamente, los de garantizar la salud de la madre y el bebé.
Más información: Cesáreas innecesarias: las recomendaciones de la OMS que España parece no escuchar