Según un estudio sueco, en las mujeres que recibieron acupuntura, la testosterona circulante se redujo un 25%. La acupuntura y el ejercicio físico mejoran los niveles hormonales y los patrones de sangrado menstrual de las mujeres con síndrome de ovario poliquístico (SOPQ), según investigadores de la University of Gothenburg, Suecia, cuyo estudio se publica en American Journal of Physiology-Endocrinology and Metabolism.
Los investigadores suecos aplicaron acupuntura a un grupo de mujeres con SOPQ, donde las agujas fueron estimuladas tanto manualmente como con una leve carga eléctrica de baja frecuencia que fue, de alguna forma, similar a un trabajo muscular. Un segundo grupo practicó ejercicio al menos tres veces a la semana, mientras que un tercer grupo funcionó como control. Todos recibieron información sobre la importancia de practicar ejercicio de forma regular y consumir una dieta sana.
En concreto, participaron en este estudio 84 mujeres con SOPQ, con edades entre los 18 y los 37 años, que recibieron o acupuntura con agujas estimuladas con electricidad de baja frecuencia, practicaron ejercicio físico o no hicieron o recibieron nada. Tras 16 semanas de seguimiento, la testosterona circulante se redujo un 25% en las mujeres que recibieron acupuntura.
También se registraron cambios en la frecuencia menstrual y en la concentración de andrógenos, estrógenos, precursores de andrógenos y androsterona glucuronido. Hubo cambios en relación con el acné, que se redujo un 32% en el grupo de la acupuntura, y el hirsutismo. Tanto las pacientes que recibieron acupuntura como las que practicaron ejercicio mejoraron la frecuencia menstrual y lograron reducir los niveles de varios esteroides sexuales a la semana 16 de estudio, en comparación con las mujeres que no hicieron ni recibieron tratamientos.
Según la Prof. Elisabet Stener-Victorin, responsable de este estudio, los resultados muestran que “tanto la acupuntura como el ejercicio reducen los altos niveles de testosterona y les permiten tener una menstruación más regular”. “De ambos tratamientos, la acupuntura ha resultado ser el más efectivo”, acota.
Aunque el SOPQ es un desorden común, los investigadores no conocen sus causas exactas. “Sin embargo, hemos demostrado recientemente que las mujeres con SOPQ tienen una gran actividad en su sistema nervioso simpático, la parte que no está controlada por la voluntad, y que la acupuntura y el ejercicio regular reducen los niveles de actividad en este sistema, en comparación con el grupo de control, lo que podría explicar los resultados”, concluye.
Publicada en esta web el 31-3-2011
Fuente: JANO (artículo no accesible en la actualidad)
Acceso al artículo: Elizabeth Jedel, et al. Impact of electro-acupuncture and physical exercise on hyperandrogenism and oligo/amenorrhea in women with polycystic ovary syndrome: a randomized controlled trial. American Journal of Physiology-Endocrinology and Metabolism 2011; 300 (1): :E37-E45