Una dieta sana y equilibrada es fundamental para el perfecto crecimiento y desarrollo de los niños. Además, los nutrientes que aportan al organismo mucho de estos alimentos previenen enfermedades como resfriados, estreñimientos, enfermedades respiratorias y combaten bacterias infecciosas para el cuerpo. Por eso, es importante que desde bien pequeños se eduque a los niños sobre buenos hábitos saludables y se les inculque sobre los alimentos más buenos y necesarios para su salud.
En líneas generales, los niños necesitan diferentes calorías al día, que dependerán de su edad, sexo y actividad. Por ejemplo, los niños de 2 o 3 años necesitan entre 1000 y 1400 calorías al día; las niñas de 4 a 8 años, entre 1200 y 1800 y los niños de 4 a 8 años, una media de 1400 y 2000 calorías.
Os señalo, a continuación, los alimentos más nutritivos y saludables para niños que no pueden faltar en su dieta. Algunos os sorprenderán:
1. Kiwi
Destaca por su alto contenido en vitamina C, incluso contiene el doble de vitamina C que las naranjas. Y se recomienda incluirlo en la dieta de niños a partir de un año de edad, aunque pueden tomarlo antes si el niño no presenta ninguna muestra de alergia y consultándole a su médico. Entre sus beneficios encontramos: previene el estreñimiento (gracias a su alto contenido en fibra), es rico en vitamina E (combatiendo infecciones), contiene ácido fólico, importante durante el embarazo y durante el crecimiento y es bueno para el funcionamiento del sistema inmune; y la vitamina C aumentan las defensas, previniendo de catarros.
2. Avena
La avena es una gran fuente de fibras, proteínas, vitaminas y minerales. Se recomienda que la consuman los niños a partir de un año de edad también, pero deben tomarla con precaución y de forma moderada, ya que contiene mucha fibra. Es un cereal nutritivo que se puede combinar con otros alimentos como la leche, el yogur o frutas.
3. Salmón
Es un pescado azul rico en vitaminas A y D. Por un lado, la vitamina A protege la piel y los tejidos del cuerpo, evitando infecciones y contribuyendo al desarrollo del sistema nervioso. Y por otro lado, la vitamina D favorece la absorción del calcio, por lo que es fundamental para la formación de los huesos y para prevenir enfermedades relacionadas con estos.
4. Espinacas
Son una gran fuente de fibras, por lo que ayuda igual que la avena al tránsito intestinal. Además, contienen calcio, hierro, vitaminas A y C. Entre sus múltiples beneficios, podemos mencionar que contribuyen a prevenir enfermedades oculares, protegen la piel del sol, fortalecen el tejido muscular y ayudan al crecimiento de los huesos.
5. Huevo
Aunque es un alimento muy energético y nutritivo, es uno de los alimentos que más alergia produce y por eso hay que incorporarlo en la dieta del niño poco a poco y a partir de los 10 meses. Si vemos que todo es normal, y el niño no presenta reacciones alérgicas, podremos ir aumentando la ración.
6. Batata
Es recomendable incluir la batata (boniato) cocinada en la dieta de los más pequeños por contener una gran fuente de nutrientes como vitamina A y antioxidantes. Tiene también hidratos de carbono que suministran al niño una gran energía. La batata también es ideal para los niños que están de exámenes, ayudándoles a mejorar la memoria gracias a la importante presencia de carotenos. El caroteno es uno de los pigmentos de un grupo de pigmentos rojos, anaranjados y amarillos llamados carotenoides y proveen un 50 % de la vitamina A aproximadamente.
7. Yogur
Este alimento es excelente para los más pequeños por sus múltiples beneficios que aportan: es rico en calcio y proteínas, contribuyendo al crecimiento de los huesos y los dientes de los niños; combate la diarrea, los especialistas recomiendan sustituir la leche por el yogur cuando el niño tiene diarrea; y contiene ácido láctico, lo que estimula la acción de las enzimas digestivas, ayudando a que los minerales de las vitaminas se absorban mejor.
8. Chocolate
Contiene proteínas, minerales, calcio, fosfato y sobre todo se caracteriza por ser rico en antioxidantes (flavonoides), lo cual es beneficioso para potenciar la memoria y mejorar el flujo sanguíneo del cerebro. Sin olvidar que tiene compuestos bioactivos que contribuyen a disminuir el estrés y a corregir este tipo de desequilibrios.
Autora: Edith Gómez Benítez, editora en Gananci